-Hice casi todas al horno y un par de ellas fritas, por aquello de ver la diferencia y tal, pues me quedo con las que hice al horno, no es que las otras estuviesen mal, al contrario, simplemente evitar los fritos, sin más.
- pasta filo.
- champiñones y/o cualquier seta que nos guste.
- cebolla o cebolleta.
- un sobre de sopa de cebolla (una cucharada del polvo)
- harina.
- leche o soja.
- sal y pimienta.
- aceite de oliva virgen extra.
-Encendemos el horno.
-En una sartén ponemos aceite a calentar, añadimos la cebolla o cebolleta muy picadita, cuando esté ya transparente le añadimos una cucharada de la sopa de sobre, rehogamos bien y añadimos las setas cortadas a trozos.
-Una vez esté ya casi hecho añadimos una cucharada de harina, todo dependerá de la cantidad que hagamos, rehogamos bien y le vamos añadiendo la leche o soja, hasta que forme una bechamel.
-Dejamos entibiar.
-Extendemos la pasta filo superponiendo dos hojas, las cortamos en 3 o 4 tiras, dependiendo del tamaño que las queramos hacer, y las vamos rellenando.
-Las doblamos en forma de triángulo.
-Las pincelamos con un poco de aceite, y las vamos poniendo en la bandeja.
-Metemos al horno, a 180º hasta que veamos que están doraditas.
-Mientras tanto ponemos aceite en una sartén, y cuando esté caliente las freímos, que se doren y sacamos a un papel absorvente.
-Y ya tenemos un platillo excepcional, como entrante o una cena o como queramos.
-Deliciosas.
On egin!!!!
Mmmm, tienen muy buena pinta!
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